SOBAN se encuentra en una ubicación estratégica: Plaza New York, con estacionamiento disponible, aunque en horas pico puede representar un reto. Al ingresar, el ambiente te transporta de inmediato a lo que imagino es un restaurante en Corea: sobrio, limpio, bien iluminado y con una decoración coherente al estilo coreano tradicional, logrando una armonía entre lo moderno y lo cultural
El servicio fue cálido y atento. El personal, compuesto principalmente por mujeres durante nuestra visita, se mostró amable, con conocimiento del menú.
🍽️ Mi Experiencia Gastronómica
Haemulpajeon (해물파전 - Panqueque de mariscos). Uno de los platos emblemáticos de la cocina coreana. En SOBAN, esta preparación superó las expectativas. La textura fue perfectamente balanceada: crujiente por fuera, húmeda y generosa en mariscos por dentro. Sin duda, el mejor Haemulpajeon probado en Panamá hasta la fecha.
Bulgogi (불고기): Clásico coreano que requiere precisión para destacar. La carne estaba finamente cortada, bien marinada en una mezcla de soya, ajo, cebollina y azúcar, con un dulzor sutil, sin sobrecargar. El punto de cocción fue ideal, manteniendo la jugosidad del corte. Presentación cuidada y porción generosa. Es un plato que cumplió ampliamente con los estándares de sabor.
SOBAN no solo cumple con los fundamentos de la gastronomía coreana, sino que logra trasmitir autenticidad, algo difícil de encontrar fuera del país de origen. Para mi, uno de los mejores —si no el mejor— de su tipo en Panamá.
