Un lugarcito muy acogedor, con comida italiana que se siente bien auténtica y buena atención.
De abrebocas, aunque no era una entrada propiamente dicha, pedimos un Fritto misto de mariscos, de presentación visual muy atractiva; me permito sugerir que en este plato incluyan una salsa tártara y una salsa roja para acompañar.
El consenso para el resto de los platos fuertes fue un rotundo y definitivo espaldarazo para las pizzas. Degustamos la 4 quesos, la marinara, la de queso con prosciutto y la de prosciutto crudo. Es cuestión ee gustos pero preferimos las pizzas así, de masa delgada y ligeramente crujientes.
Uno de nuestros restaurantes favoritos de comida peruana, tanto por su oferta gastronómica, como por su ubicación, disponibilidad de estacionamientos, atención y ambiente.
En esta ocasión fuimos un grupo grande, de 11 comensales, en el marco de una celebración de cumpleaños y pedimos de todo: anticuchos, jalea mixta, arroz chaufa, tacu-tacu norteño, picante de mariscos, pescado a lo macho, pescado en salsa de champiñones, lomito saltado, tallarines saltados y timbal de langostinos.
Es mi restaurante mexicano favorito. La comida es auténtica, el ambiente llamativo y acogedor y la atención excelente.
En esta ocasión pedimos unos nachos 3 quesos de entrada. Es impossible visitar un restaurante mexicano sin degustar...TACOS!! Por lo tanto, pedimos el campechano, tinga y al pastor, todos muy buenos. También pedimos una quesadilla a la marquesa.
Volveremos cuando surja nuevamente el antojo por comida mexicana.
Teníamos rato de no visitar Tataki, su cocina es una de nuestras favoritas tanto en comida peruana como en sushis.
En esta ocasión pedimos una pizza de salmón de entrada, y de platos fuertes optamos por un ceviche mixto, un arroz chaufa, un sushi roll raikiri y un Alaska Roll.
Debido a que el restaurante estaba lleno (con gente esperando mesa y todo), el servicio sufrió un poco, pero es comprensible.
Muy buena la experiencia en Juana Tranquila. El ambiente en Balboa Boutiques es agradable y entretenido. La oferta gastronómica no es típica mexicana, pero igual tienen muchos platos apetecibles y que llaman la atención. De entrada pedimos un Macho Renacho, y nunca nos imaginamos que la porción era tan grande - definitivamente para compartir. De plato fuerte ordenamos varios platos de tacos - Juana Mezclada, la Arrachera, Juana Tranquila, y la torta, o hamburguesa La Pocotona, combinaciones interesantes. Una sugerencia: invéntense un picante de la casa; impacta más un picante preparado por el propio restaurante que ofrecer el típico Tabasco o Cholula.
Hace rato Muh Panamá estaba en nuestro radar pero por una razón no habíamos podido ir. La espera valió la pena.
Las carnes son una delicia. Probamos de entrada unas empanaditas Muh, crocantes y con un relleno de chorizo, queso y chicharrón simplemente espectacular. De plato fuerte pedimos el vacío, el emparedado de pernil, emparedado de entraña y un medio rack de costillas de cerdo.
Buen servicio y un ambiente interesante que incluye un punto de venta de carnes empacadas en la entrada, hicieron de esta visita algo diferente.
Decidimos probar esta oferta gastronómica, sobretodo por las buenas reseñas emitidas a través de esta plataforma.
Inicialmente me preocupó el área donde se ubica el restaurante por las interminables remodelaciones de infraestructura en las calles. Sí llegamos bien, pero el área de la calle parece una zona de guerra y nada indica que una finalización cercana.
La comida estuvo buena, tiene su toque personal. Pedimos una pizza marinara clásica, una de arugula con jamón, spaghetti matriciana y unos raviolis con salsa blanca. Todo muy rico.
La atención, aunque esmerada, en esta noche estuvo un poquito olvidadiza; inicialmente no nos trajeron servilletas y me quedé esperando la pimienta roja que solicité y nunca llegó.
El ambiente es muy llamativo, me parece un tremendo acierto que lo primero que vea el comensal sea el mostrador de helados!
Muy interesante la fusión alemana-mexicana en gastronomía- salen unos platos muy sabrosos.
De entrada pedimos unos naked sliders y unos rollitos de knödel. De plato fuerte nos inclinamos por la Tampiqueña Molcajete con un buen toque de picante, la milla verde - ese filete de cerdo con la pasta spätzle, riquísimo. El pastel Ambrosía y la pasta San Francisco completaron nuestra selección. El codillo quedará para otra ocasión.
El servicio fue muy atento y esmerado.
Teníamos rato de no visitar Aglio Rosso, tanto tiempo que la última vez que lo visitamos tenían una sucursal en San Francisco que ya no existe.
La pegaron con la sucursal del Sortis, pues el ambiente es muy bueno.
La carta es muy variada y nos gustó mucho la opción de armar el plato de pasta al gusto.
De entrada pedimos unos provolone sticks, que cayeron muy bien con sus dos salsas. De plato fuerte pedimos un Salmon Lover Poke, una pizza 4 quesos, la pasta de los dos amigos divertidos, y un fettuccini Alfredo.
El servicio estuvo a la altura, muy atento y pendiente el mesero Miguel.
Fue nuestra segunda visita a Mika; la 2era visita fue en abril. El menú ha sido levemente modificado, pero de una manera tan sutil que es casi imperceptible.
La oferta gastronómica sigue siendo atractiva. En esta ocasión pedimos el plato del negro Chimbombó - excelente por cierto -, la pasta bolognesa, el beef stroganoff y la sopa de tortilla con unos patacones de acompañamiento.
La atención fue impecable y el ambiente me encanta, con la amplitud y decoración.
La Scarpetta
Un lugarcito muy acogedor, con comida italiana que se siente bien auténtica y buena atención. De abrebocas, aunque no era una entrada propiamente dicha, pedimos un Fritto misto de mariscos, de presentación visual muy atractiva; me permito sugerir que en este plato incluyan una salsa tártara y una salsa roja para acompañar. El consenso para el resto de los platos fuertes fue un rotundo y definitivo espaldarazo para las pizzas. Degustamos la 4 quesos, la marinara, la de queso con prosciutto y la de prosciutto crudo. Es cuestión ee gustos pero preferimos las pizzas así, de masa delgada y ligeramente crujientes.
Puntarenas
Uno de nuestros restaurantes favoritos de comida peruana, tanto por su oferta gastronómica, como por su ubicación, disponibilidad de estacionamientos, atención y ambiente. En esta ocasión fuimos un grupo grande, de 11 comensales, en el marco de una celebración de cumpleaños y pedimos de todo: anticuchos, jalea mixta, arroz chaufa, tacu-tacu norteño, picante de mariscos, pescado a lo macho, pescado en salsa de champiñones, lomito saltado, tallarines saltados y timbal de langostinos.
Agave Azul
Es mi restaurante mexicano favorito. La comida es auténtica, el ambiente llamativo y acogedor y la atención excelente. En esta ocasión pedimos unos nachos 3 quesos de entrada. Es impossible visitar un restaurante mexicano sin degustar...TACOS!! Por lo tanto, pedimos el campechano, tinga y al pastor, todos muy buenos. También pedimos una quesadilla a la marquesa. Volveremos cuando surja nuevamente el antojo por comida mexicana.
Tataki (Obarrio)
Teníamos rato de no visitar Tataki, su cocina es una de nuestras favoritas tanto en comida peruana como en sushis. En esta ocasión pedimos una pizza de salmón de entrada, y de platos fuertes optamos por un ceviche mixto, un arroz chaufa, un sushi roll raikiri y un Alaska Roll. Debido a que el restaurante estaba lleno (con gente esperando mesa y todo), el servicio sufrió un poco, pero es comprensible.
Juana Tranquila
Muy buena la experiencia en Juana Tranquila. El ambiente en Balboa Boutiques es agradable y entretenido. La oferta gastronómica no es típica mexicana, pero igual tienen muchos platos apetecibles y que llaman la atención. De entrada pedimos un Macho Renacho, y nunca nos imaginamos que la porción era tan grande - definitivamente para compartir. De plato fuerte ordenamos varios platos de tacos - Juana Mezclada, la Arrachera, Juana Tranquila, y la torta, o hamburguesa La Pocotona, combinaciones interesantes. Una sugerencia: invéntense un picante de la casa; impacta más un picante preparado por el propio restaurante que ofrecer el típico Tabasco o Cholula.
Muh Panama
Hace rato Muh Panamá estaba en nuestro radar pero por una razón no habíamos podido ir. La espera valió la pena. Las carnes son una delicia. Probamos de entrada unas empanaditas Muh, crocantes y con un relleno de chorizo, queso y chicharrón simplemente espectacular. De plato fuerte pedimos el vacío, el emparedado de pernil, emparedado de entraña y un medio rack de costillas de cerdo. Buen servicio y un ambiente interesante que incluye un punto de venta de carnes empacadas en la entrada, hicieron de esta visita algo diferente.
Fragoloso Trattoria
Decidimos probar esta oferta gastronómica, sobretodo por las buenas reseñas emitidas a través de esta plataforma. Inicialmente me preocupó el área donde se ubica el restaurante por las interminables remodelaciones de infraestructura en las calles. Sí llegamos bien, pero el área de la calle parece una zona de guerra y nada indica que una finalización cercana. La comida estuvo buena, tiene su toque personal. Pedimos una pizza marinara clásica, una de arugula con jamón, spaghetti matriciana y unos raviolis con salsa blanca. Todo muy rico. La atención, aunque esmerada, en esta noche estuvo un poquito olvidadiza; inicialmente no nos trajeron servilletas y me quedé esperando la pimienta roja que solicité y nunca llegó. El ambiente es muy llamativo, me parece un tremendo acierto que lo primero que vea el comensal sea el mostrador de helados!
Malta y Vid
Muy interesante la fusión alemana-mexicana en gastronomía- salen unos platos muy sabrosos. De entrada pedimos unos naked sliders y unos rollitos de knödel. De plato fuerte nos inclinamos por la Tampiqueña Molcajete con un buen toque de picante, la milla verde - ese filete de cerdo con la pasta spätzle, riquísimo. El pastel Ambrosía y la pasta San Francisco completaron nuestra selección. El codillo quedará para otra ocasión. El servicio fue muy atento y esmerado.
AglioRosso (Sortis)
Teníamos rato de no visitar Aglio Rosso, tanto tiempo que la última vez que lo visitamos tenían una sucursal en San Francisco que ya no existe. La pegaron con la sucursal del Sortis, pues el ambiente es muy bueno. La carta es muy variada y nos gustó mucho la opción de armar el plato de pasta al gusto. De entrada pedimos unos provolone sticks, que cayeron muy bien con sus dos salsas. De plato fuerte pedimos un Salmon Lover Poke, una pizza 4 quesos, la pasta de los dos amigos divertidos, y un fettuccini Alfredo. El servicio estuvo a la altura, muy atento y pendiente el mesero Miguel.
Mika Bazar & Cafe
Fue nuestra segunda visita a Mika; la 2era visita fue en abril. El menú ha sido levemente modificado, pero de una manera tan sutil que es casi imperceptible. La oferta gastronómica sigue siendo atractiva. En esta ocasión pedimos el plato del negro Chimbombó - excelente por cierto -, la pasta bolognesa, el beef stroganoff y la sopa de tortilla con unos patacones de acompañamiento. La atención fue impecable y el ambiente me encanta, con la amplitud y decoración.