Desde que llegas a Kaandela, comienzas a vivir una experiencia sensorial: entre la arquitectura del Casco Antiguo y los aromas que salen de la cocina, sabes que estás por probar algo especial. Los langostinos empollerados tienen un toque ahumado único, lleno de carácter. Y algunos platos tienen ese sabor reconfortante que te transporta directo a la cocina de la abuela. Un lugar que combina lo tradicional con lo creativo, y que invita a volver…
Muchas gracias estimada Olis por compartir su experiencia en Kaandela.
Nos alegra profundamente saber que nuestra propuesta gastronómica le evocó recuerdos tan especiales y significativos.
Será un verdadero placer recibirle nuevamente cuando desee volver.

