Casa Alejandro

Los adjetivos se pierden con el que, a mi juicio (y quizás pecando de subjetiva) es el mejor restaurante de Panamá. Ser atendido por el chef, que ajusten el menú a tu necesidad y gusto, un vino de la casa que enamora, una maravillosa atención y sin duda, un exquisito placer al paladar los platos no me deja lugar a dudas para que, a la fecha, esté en mi top ten. Se paga con gusto lo que vale.

Buscábamos un lugar para comer y conversar un poco, y caminando lo vimos y decidimos probar. El pan gallego delicioso!! Pedimos conejo y pulpo para compartir ademas de una botella de vino. El lugar es pequeño pero acogedor, nosotros llegamos sin reserva y quedaba una mesa libre y es ello que pudimos comer. El lugar vale la pena; vayan a probarlo, pero hagan reserva primero.

Para saber si es español hay que probar la tortilla de patatas y aquí está buenísima, el resto de las raciones muy recomendable. Vamos bastante y nunca falla.

Lugar modesto sencillo pero agradable. El Chef Alejandro muy personal en su atención al cliente y dispuesto a recomendar lo mejor de su cocina mismo que llegamos con 20 minutos antes del cierre. Las chistorras y los champiñones con serrano deliciosos. Las croquetas de serrano podrían aguantar un poco más de serrano. Regresaremos definitivamente para degustar otros platos de la carta para así poder calificar por completo a Casa Alejandro.

Tuvinos una celebracion importante y por eso escogimos este restaurante sin pensarlo, ya que es nuestro favorito; pero debo decir que a pesar de que la variedad entradas que pedimos estaban fabulosas , todos nuestros platos fuertes, que eran diferentes uno de otro, estaban salados en exceso !! Y mi arroz negro que acompañaba el mero estaba pasado de cocción. Quedamos un poco decepcionados esta vez Por lo demás la atención y selección de vinos excelente