He sido cliente frecuente del Panamonte desde que tengo memoria, ha sido un sitio donde he creado buenos momentos y buenas memorias. Lastimosamente, de las últimas veces, he notado una reducción en la calidad del servicio y de la comida. A pesar de eso, el sentimentalismo me ha regresado una y otra vez; puesto a que tienen buenos desayunos. Esta última vez que fui, creo que ya sería la última vez que voy. La calidad de la comida ha bajado considerablemente y encima nos cobraron mal con unas bebidas que ordenamos. Cobrándonos hasta el doble. Luego de haber pagado y dejado la propina; usaron el pretexto de que el supervisor ya se había retirado y no había nada que podían hacer. Encima de eso, no nos querían dar la factura fiscal. Se la pasaban diciendo que la próxima vez que viniera a Boquete, nos regalaban algo por la diferencia. Entiendo que parte del error la tuve yo por no revisar antes de pagar, pero es que he tenido esta confianza desde siempre con ellos y también que no me entregaron la precuenta hasta luego de pagar, para hacer pasar como “factura”. Es triste ver cómo tú lugar favorito en Boquete decae, una vez ya hayan conseguido esta popularidad. Más triste es ver cómo cambiaron de actitudes y el nivel de servicio; tan pronto les pagamos y recibieron sus propinas.
