Los postres son muy buenos. Pedimos una variedad que trae un poquito de varios y pudimos probar los macarroons, creme brulee, la torta de chocolate tipo brownie y capuccino. La comida es muy buena también, todo fresco y hecho con técnica y alta calidad como se pudiera esperar de la cocina francesa. Probamos una pizza de pollo y champiñones (mi unica queja sería que esta ligeramente sobrecocida y algo seca, no se si tal vez necesita un poco mas de salsa o crema para mantener un poco de humedad, también probamos la pasta con langostas excepto que la pedimos con salsa roja a petición de la comensal que me acompañó y también probamos la tartaleta de limón que cuenta con una galleta de base especial traída de francia y el custard delicado pero a la vez al punto con las notas adecuadas de limón que casi que recuerda a los limones amarillos mediterráneos bien perfumados. El ambiente a pesar de estar en medio de un mall es bastante agradable, acojedor y a la vez con estilo clasico francés que te transporta. La comida tiene una relación costo-calidad excelente ya que ofrecen comida fresca, de muy buena calidad muy a lo café francés con un menú sencillo pero a la vez variado y alta pastelería con su sello distintivo. Sinembargo en esta sucursal un tema a mejorar tal vez podría ser contratar mas personal para atender el salón. Los meseros no se dan abasto y a pesar de que su trato es muy amable y te atienden de una vez apenas te sientas, detalles como traernos cubiertos, cucharas para el postre y agua quedaban al olvido. Aparte de eso todo muy bien. Definitivamente seguiremos frecuentando esta sucursal.
