Niba

El restaurante es bonito, la atención es muy buena, solo que en ocasiones también deben dar un poquitín de mas espacio para preguntar si necesitan algo los comensales, cuando es muy seguido perece presión, pero en general bien. La comida no esta mal peri debe mejorar, por el estándar que uno espera, las yucas grasosas eso no debe pasar, y el sabor del plato en general es bueno pero puede ser mejor. Aún asi es recomendado.

El lugar me encantó, sobretodo la terraza con. Vista a la ciudad, la atención de Rachell fue lo mejor de la noche sacó la cara por la comida que en realidad no estaba nada buena. La relación precio y calidad nada que ver las porciones pequeñas y nada tenía sabor. Pedí unos camarones aplanados como entrada sin sabor, pedímos una ensalada con fresas y queso fresco más o menos, el queso asado frío y el cheese cake bajo en azúcar sin sabor. No creo que regresaría. Bueno el jugo que me preparo el bartender estaba bueno y los panes de la mesa

El lugar es muy lindo, gran vista. En cuanto a la comida, empecemos por la entrada del queso, la salsa que va encima del queso estaba rica, el queso le hizo falta un poco de sal, el especial del chef : Corvina con salsa de langostino, es una porción bastante considerable, la corvina tenía buen sabor y el acompañamiento los patacones estuvieron muy ricos (pidan el picante, le da un toque especial), en cuanto al servicio, debo decir que es bastante bueno, los meseros siempre estuvieron pendientes y una atención de primera!

Balance: Precio Vs. Calidad y sabor de la comida, la relación es muy baja, para una cena de 4 personas. La Vista de noche es agradable. La atención fue regular, hicimos reserva y al llegar no estaba lista la mesa y no estaba lleno el restaurante, deben mejorar. En general, no lleno mis expectativas. Salimos desilusionados. USD48.00 por persona.

Agradable ambiente con una linda vista a la bahía de Panamá. La comida es buena, nada espectacular. Mi esposo pidió un filete que estaba bien pero un poco subido de sal. Yo ordené una lechona que venía acompañada de un tamal de olla que estaba bastante bueno.El servicio no es bueno. A pesar de que es una terraza amplia, tiene pocas mesas y los meseros estaban enredados. Tuvimos que pedir el agua dos veces al igual que una servilleta que no tenía en mi puesto y nos ofrecieron un pan que nunca llegó.