Ayer en la noche estuve con mi novia y sus amigas tomando unas cervecitas y traguitos. Aproveche el momento para ordenar unos nachos (no había cenado) los cuales estaban buenos (aunque no eran lo mejor del mundo). Las cervecitas y los traguitos en su punto de frío (en eso no hay queja alguna). El servicio no estuvo tan bueno: la mesera demoraba en traer los tragos y las cervezas, olvidaba algunos vasos con hielo que le pedimos y en algún momento hasta olvidó traerme un trago que había ordenado. Con los nachos fue bastante rápido, pero el resto del servicio no lo hallamos a la altura. El ambiente en la noche es buenísimo: la terracilla que ofrece el lugar es espectacular, bien iluminada y bastante fresca. También tienen un ambiente cerrado con música en vivo que estaba bastante bueno. Aunque no fue el caso en esta visita, he tenido la oportunidad de probar algunos dulces que vende este lugar y son buenísimos. Les recomiendo el lugar como una repostería o para tomar unas cervezas/tragos de noche con amigos.
