Es un restaurante que tiene bastante potencial, no es un tipo de comida que veas muy seguido. El lugar tiene desventajas debido a lo alejado que está del centro de Casco. La comida tiene muy buen sabor, y la relación precio calidad también es buena. Algo que me agradó mucho fue que el cocinero tuvo el detalle de preguntarnos qué tal había estado la cena. Eso por lo positivo. Ahora, el lugar tenia un fuerte aroma a humedad, y si yo que nunca huelo nada pude percibirlo, ha de ser fuerte, esto no es algo extraño en los edificios de este sector, pero se puede tomar medidas para evitarlo. El personal: mientras que la chica que nos atendió fue muy atenta, el bartender alto (sale en IG) en un momento puso música de su agrado a un volumen exagerado, la chica incluso le llamó la atención de que a los comensales les hacía molestia el volumen, y el hizo un gesto de "Y qué importa?". Creo que un supervisor de turno bien entrenado sería una buena adición al equipo, o un entrenamiento de conducta laboral. También estaría bueno, que la música de ambiente que suene, siempre sea de la región de Georgia, ayudaría a conocer la cultura
