Es un restaurantito muy acogedor, de buenos precios, para mí es una versión de comer en casa de tu abuelita italiana. PEdimos la pasta marinara para mi hija, yo pedí el filete parmigiana con ensalada (la ensalada excelente), mi esposo la lasagna. Tienen un menú para todos los gustos, atienden bien y es económico. Las dos veces que fuimos nos gustó todo lo que probamos.