Un amigo lo escogió para celebrar mi cumpleaños, el. Lugar es acogedor, al aire libre cubiertos por un árbol de mango frondoso, ambiente oscuro y música relax. Tienen tanto cócteles como tragos tradicionales. De comida no truenen platos fuertes como tal para sí buenas opciones para compartir. Arranqué con un The gentlemen, fuerte 10/10, compartimos los nacos, favoritos del grupo, los chiken tenders, los shrimps tempura (mis favoritos) y los crock & roll (saber bien fuerte del queso), cerré la noche con un Dejavu, muy bueno. Lo mejor es que no te cobran descorche del pastel. Único detalle en contra como había llovido y hay tierr6por el árbol, había algún mosquito molestando, por lo demás hay vale parking, me ayudo con el pastel, el encargado muy amable, servicio rápido y si llueve habilitan un área cerrada. Volvería

El sitio es acogedor, con estacionamiento y valer parking, fui con mi niña pensando que tenía área infantil (solo es en alta plaza) igual tienen para que los peques colore en y tienen menú infantil. La decoración y música son agradables. Para mi peque pedí chickenntenders con papas y soda, abundante tuvimos que llevar a casa, para mi el pulpo que venía en una cama de papas majadas, muy bueno, de coctel el 5conco five muy bueno, de postre brownie con helado y un café americano.

La comida rica como siempre, la promoción de tragos a 5 deliciosos, y aunque lamentable a la segunda vuelta que pedimos se demoraron demasiado, fue un problema en la cocina pero el chico que nos atendió fue siempre muy amable

La atención fue tan buena que aunque no tienen café en el menú me prepararon uno. El ambiente relajante, buena música asientos cómodos

Aunque fue un poco dificil ubicarlo cuando llegas el lugar es muy acogedor, un remanso de paz lleno de plantas y música Sueve, ideal para conversar. Fui con mi nena de 3 años por el área de juegos que tienen, es la mejor idea es una habitación separada donde puedes comer allí mismo mientras ellos juegan bien seguros. Ordenamos capuchino doble y Frozen de fresa muy buenos, tarta de chocolate bastante liviana y diferente, es más crema que masa y hamburguesa con papas fritas, las papas crujientes a la hamburguesa solo le faltó un poco de aderezo para mejor el sabor. Las porciones muy buenas.

Nos recibió la sonrisa de los dueños, el lugar se ve pequeño pero tiene un segundo nivel acogedor, la atención fue rápida, la selección de tragos es de solo 3 pero bien elaborados, los platos no demoraron demasiado y era muy buena cantidad. Tomé el Moscow mule con bastante gengibre y el rissotto de mariscos ambos muy buenos. No cobran el descorche de pastel de cumpleaños y puedes llevar tu decoración, el violinista y la orquesta de salsa muy buena.

El lugar impresionante, hermosa decoración, no es exactamente un sitio para conversar ya que tanto la música del show como la música ambiente tiene el volumen bastante alto. En cuanto al show es espectacular y ameno, la música del entretiempo invita a bailar aunque el sitio no tiene pista de baile. Entrando en materia nos atendió Valentín, un amor, excelente, agradable y profesional. De entrada pedimos el pulpo caramelizado, estuvo bueno aunque mi idea de caramelizado era un sabor dulce y no fue así, mi pareja pidió los camarones, súper crocantes, de plato fuerte compartimos una entraña, aceptable y arroz chino latino bastante bueno. Las bebidas fueron furia de dragones, un espectáculo tanto en presentación como en sabor, el viejo y el mar, deliciosa.

Lugar acogedor, relax, bueno para conversar, los gin tonics deliciosos, bien presentados y a 4.99 los viernes, los sushi espectaculares sin queja y el postre, solo ofrecen uno pero vale la pena el helado de galletas y las bananas crocantes hacen buena combinación. La atención muy amables, único detalle los pocos estacionamientos

fuimos sin reserva porque era temprano nos encontramos con que estaba reservado para un evento en la noche aún así nos ofrecieron el área de la terraza pero estaba muy caliente, nos íbamos a retirar y el mesero muy astuto nos acomodó una mesa dentro porque había tiempo antes del evento. Los tragos cuestan casi todos 10 están aceptables pero no espectaculares, de entrada pedimos los langostinos pero nos indicaron que era veda y no podían servirlos en su lugar una cazuela de mariscos de plato principal yo unos raps de pollo secos para mí gusto y el pidió carne en una cama de puré de papas le faltó más sabor a la carne. El lugar tiene bonita decoración y buena música de fondo

Hicimos reserva un lunes, nos recibió Jerry la mascota con una sonrisa, la atención es súper rápida y amable pedí un paleo de mariscos con arroz y patacones bien crujientes para acompañar, unos chicken tenders para las niñas y una pasta Alfredo deliciosa de tomar un roar delicioso y en presentación súper original y margarita de coco 10/10.