Sucaro

Vine a este lugar con grandes expectativas por sus comentarios. Es un pequeña cafetería agradable y acogedora. Los cheesecakes excelentes, pero el dulce de zanahoria fatal. El dulce de zanahoria estaba duro y seco. No estaba fresco. El café no me pareció muy bueno. Deben cambiar los menús, éstos están deteriorados y viejos, causando una mala impresión de entrada al cliente. Recomiendo los cheesecakes.

En cuanto al cheese cake, Estaba bueno, me esperaba un sabor más intenso a pistacho, y una consistencia más cremosa. Pero en general esta bien. Y en cuanto al postre de fresa muy bueno y equilibrado el crujiente de base de pie y el ácido de las fresas muy muy rico, esta fresco y nada empalagoso.

Delicioso todo. Ambiente acogedor. El brunch estaba riquisimo y de buena porción. Todo esta bien preparado y riquísimo. Los postres sensacionales.

Nos llevamos una grata experiencia de esta pastelería. El ambiente tranquilo nos invitó a disfrutar de un delicioso desayuno. La atención recibida fue excepcional, siempre con una sonrisa amable la joven que nos atendió. Los sabores de la comida, los postres, el te y un buen café nos deleitaron. Sin duda, una experiencia que vale la pena repetir pronto.

Un local chico pero hermoso para contentar tu corazón con algo dulce. Recomendado la tarta de queso vasca no crean que es un cheesecake cualquiera es una delicia