Le Bistrot

Restaurante tradicional de mucho arraigo en nuestro medio Siempre amable sus Waiters su sabor a sus platos es especial Mi corvina con salsa de langostinos a otro nivel

Fuimos a cenar la noche de año nuevo. El restaurante muy lleno como es de costumbre con clientes “regulares”. El servicio estuvo pésimo, todo demoró una eternidad, había que buscar y señalar al mesero para que viniera a la mesa. Pedimos un coctel, hubo que recordarle porque nunca llegó. La comida otra decepción enorme... fría y además si sazón no sabor. Yo pedí la langosta termidor que creo es uno de los platos más costosos y la salsa blanca sabía a cartón. El resto de las personas en la mesas también estuvieron decepcionados con sus platos. De postre un tres leches de los peores que he comido y para rematar demoraron 30 min para traer la cuenta... no vuelvo!

Fuimos siete personas, la reserva nos esperaba. La comida excelente como de costumbre; el menú especial tiene unos platos riquísimos. Preguntamos por algunos platos fuera del menú y nos complacieron con mucho gusto. El servicio muy atento. Mis huéspedes quedaron encantados. Lugar para volver sin dida alguna

Le Bistrot es sin lugar a dudas mi restaurante favorito. TODO lo que cocinan es delicioso. Los mariscos, sus arroces, las entradas...en verdad, que se esmeran en todo lo que preparan. A pesar de los años, mantienen la calidad de sus ingredientes. La atención de sus meseros es inmejorable y cuentan con un músico que complementa las veladas de una forma sensacional. Si no estás seguro de dónde ir a comer rico, este es el lugar perfecto. Nunca falla. Sigan así!

Reunión familiar, almuerzo de negocios, una cena romántica; Le Bistrot, sin duda, es el restaurante indicado. Es un lugar romántico, elegante y acogedor, por su escenografía y luces atenuadas. La comida, como siempre, está exquisita. Área pulcra y servicio muy atento.