Diablicos

Me gustó que el dueño estuviese afuera del restaurante invitando a todos los que pasaban por en frente. Se ve que se involucra mucho en el día a día y eso es importante en el negocio de la comida. El lugar es bonito, tiene decoración nacional y pintoresca. De entrada las carimañolas no me gustaron, no les sentí buen sabor pero todo mejoró con la ropa vieja, patacones y arroz con guandú de plato fuerte. El servicio fue extremadamente rápido, no esperamos ni 15 minutos por el plato fuerte. Creo que es un buen sitio para llevar turistas, no me pareció wao pero un lugar diferente en el casco histórico.

Estabamos caminando en el Casco Viejo y nos dio ganas de unas bebidas, improvisamos y nos decidimos por este restaurante. Muy linda decoración, ambiente relajado y el servicio esta ok. Pedimos: Una limonada y una cerveza Atlas Golden. Recomendado 100%

Fuimos un grupo de 15 el servicio excelente y pendientes todo el tiempo de la mesa. Buenas porciones en los platos, el ambiente y la decoración divinos. Todo estuvo delicioso. Arroz con pollo, sancocho, guacho de mariscos, yucs con chicharron etc etc

La comida ha bajado su calidad, pero se puede mejorar, la comida es autóctona de Panama y el servicio puede mejorar, pero no creo que regrese hasta que mejoren su calidad de comida y servicio

Caminando por el Casco Antiguo, me topé con Diablicos y me dispuse a probarlo. Pedimos platillos simple y de la cocina panameña, tales como un ceviche, empanaditas y un sancocho para el alma (que me la tomé de noche). Me hubiese gustado que las empanaditas tuviese un poco más de relleno.