DaFranco

El restaurante es pequeño pero bastante acogedor. El servicio está regular, no son muy atentos. La comida me gustó, pedimos pasta Alfredo con pollo (hubiese preferido la salsa un poco más espesa), fettuccine con carne apanada (nos indicaron que la carne era filete de res, cuando en realidad no lo era y estaba un poco dura) pizza Spuntino y fettuccine al aglio olio con mariscos.

Un buen risotto no tiene caldo, Pedí el risotto de langostinos, que termine devolviendo porque el arroz estaba extremadamente duro pese a que tardaron bastante en servir... y sabia a Sopa ... (nunca nadie pidió disculpas por hacerme perder mi cena) en general la atención (de los meseros) es buena y el lugar es agradable, aunque las sillas son incómodas, no regresaría!

El trato fue de primera desde que llegamos hasta que salimos! Los viernes tienen música en vivo. Probar obligatoriamente: Pimientos al piquillo rellenos de queso de cabra y los Involtini. La pasta, a pesar de ser hecha en casa, no me encantó.

La verdad el precio está pasable pero la cantidad de comida es algo gourmet. Les recomiendo para los cafeteros, el capuccino o el machiatto. Disfruten la sangría.

Muy buena la comida. Aunque el restaurante es un poco pequeño, tienen muy buen ambiente y la atención es muy buena. Recomiendo los raviolis en 3 salsas.