Azahar

Este ha sido para mi el mejor restaurante que he visitado en Panamá. El ambiente es regio, comí una entrada de puré de plátano con queso de cabra que estaba sensacional, también probé la pizza de atun, sencillamente sublime, y luego me comí un roll de langosta Azahar, que es como extremadamente sublime. Algo que me gustaría recalcar, es que el tamaño de los rolls es adecuado para que se pueda comer con facilidad sin que se rompa, eso es algo que realmente me parece muy bueno, tienen una medida lógica y agradable para ingerirlos sin mayor dificultad. No pueden visitar este lugar sin pedir un servicio de Martini, no les voy a decir como lo hacen, para que se intriguen y lo pidan, las combinaciones son sublimes. Los postres estuvieron muy bien, pero yo me inclino por la comida salada y fue tan espectacular...

El restaurante es bonito, con un ambiente bastante íntimo. La comida es muy buena, al igual que la primera vez que fui. En cuanto al servicio, no es el mismo de aquella vez que fui, ha bajado un poco su calidad, pero no es del todo malo. La mesa se dejó un poco descuidada, la comida demoró un poco en llegar y tuvimos que pedir por el agua un par de veces. Pueden mejorar un poco más!

Lindo ambiente y atención esmerada, probamos los dumplings de camarón y la pizza de atún de entrada, esta última fue fantástica. De plato fuerte un risotto de langosta, excepcional, la verdad no me esperaba que estuviera tan delicioso y de postre un cheesecake de nutella. Todo estuvo excelente! Muy recomendado para cenas familiares.

Muy rico todo, las entradas excelentes. la pizza de atun y las philly entrañas riquísimas. el especial era un rissotto de mejillones que estaba muy delicado y rico. los raviolis de zapayo también delicados y deliciosos.

Muy buena atención. Hace rato no me siento tan atendido en Panamá. La comida estuvo rica. La pizza de tuna deliciosa y los risottos cocidos perfectamente al dente. Lo unico negativo fue el termino de mi carne la pedi 3/4 y me la cocieron 1/2. Tampoco tenían una variedad de postres. Solo tenían dos.