Uno de los restaurantes Asiáticos más variados de la ciudad, me encanta la terraza. Esta llena de plantas y no parece que estés en medio de la ciudad, no hay sonidos de la ciudad que no te dejen conversar en paz. De noche el techo es retráctil y se puede ver el cielo estrellado, no es caliente, súper fresco. Los rock shrimp tempura siempre serán de mis entradas favoritas al igual que el edamame picante. Y el mejor postre en mi opinión siempre será el postre de frutas y galleta + helado de mango y malvas, es increíble y no empalaga.

Buenísimo en lunch, súper buena la comida. Comi un poke bowl sin carne y estana increible. El postre que recomiendo es el lava cake.

Es un poco caro y las porciones pequeñas pero vale la pena por el sabor. Los tacos de chorizo son buenazos y también el guacamole. La verdad es que lo recomiendo y más cuando hay ofertas.

El ambiente increíble, me encantó el graffiti aunque no pude ver cuál era el artista. Las luces también súper industriales. Es un restaurante muy bueno para ir a tomarse unos tragos (lamentablemente y no tienen el de la tina que los hizo famosos) y picar, picar, picar. Los churros estaban increíbles, lo que le cambiaría es la salsa de chocolate a un dark chocolate sauce para balancear con los churros ya azucarado. Pero además de eso la hamburguesa vegana estaba bien buena de sabor lo único es que el patty se desmoronaba y las entradas muy buenas, especialmente el fried siu mai y los camarones fritos también.

Este siempre va a ser uno de los go-to’s de mi familia y yo. Es un clásico. Lo que más recomiendo es obvio los postres, pero de comer el Stroganoff, las ensaladas Portofino y Fiorentina, y el pollo al curry. 10/10

Me parece un buen restaurante. Regresaría con amigos a hablar y echar cuentos pero no está de #1 en lugares donde tengo que regresar. Lo mejor del menú que probé fue el Mac and Cheese de Lobster y el Coliflor frito con salsa barbacoa. Esos los recomiendo al igual que los taquitos de tuna con trufa. Los camarones fritos literalmente sentí más lo frito que ningún camarón, no los recomiendo. Pero muy buen ambiente y servicio. El postre de oreo en mi opinión no vale las calorías y prefiero un oreo madness de Friday’s, ups.

No volvería la verdad, no fue increíble ni malísimo solo fue ok. Las yucas fritas estaban soggy y para nada crujientes.

Muy buena la berenjena con tomate y queso feta, el pulpo y la salsa increíble, y el queso feta con miel estuvo fuera de este mundo.

El ambiente es de estar como en un lugar muy hip lleno de graffittis y menús grandes. Sus hamburguesas son todas buenísimas y la carne también. Le recomiendo este restaurante a los amantes de hamburguesas.