Siempre que venimos aquí comemos bien rico. El pescado se sentía fresco al punto de cocción exacto y de tamaño suficiente. La guarnición de patacones y arroz sabrosas también. Las cervezas bien bien frías. El servicio del mesero siempre amable, además siempre nos atiende el mismo muchacho. La ubicación del lugar es agradable por las vistas y la brisa sobre todo a media tarde. Esta vez lo único que se nos olvidó sacar fotos del pescado por el hambre que traíamos jajajaja...