El lugar es perfecto para desconectar. Espacios cómodos y tranquilos, no puedes dejar de utilizar las hamacas justo frente al mar. Habitaciones limpias y amplias, balcon con hamaca que no puedes dejar de usar. La comida fue una buena noticia, todo lo que probamos estuvo muy rico, el pulpo a la parrilla, y sus pescados deliciosas. La picatas bien. Un consejo, no te tardes mucho en ordenar luego de las 9 y algo imposible comer o tomar algo. La única nota baja del lugar