Uno de mis restaurantes favoritos y el que más frecuento últimamente. Buena comida, tremendo ambiente, precios razonables y una atención excelente. Silvia es lo máximo!!!

Excelente experiencia en un nuevo restaurante en Costa del Este.Un lugar muy agradable con espacio y ambiente muy amenos. Buena atención desde el principio. inicialmente no muy contento con la noticia de que te cobran 20.00 por descorche de tu vino, pero los precios de la comida compensan ese cargo. En Degusta anuncian 40% de descuento en algunos platos; sin embargo en el menú aparece 50%. hay que decir que los platos que tienen 50% de descuento parecen más bien inflados en precio. Sobre la comida: una buena sorpresa y una excelente experiencia. El plato de pasta con camarones y brócoli está buenísimo. el dulce de tres leches no me pareció nada del otro mundo. La buena noticia es que final cuando te tren la cuenta no te parece como si estuvieras comiendo en Chicago o Manhattan. Lo recomiendo.

Tremendo lugar para una buena comida. El local anterior en San Francisco era malo, pero ahora han logrado un avance notable. El servicio es excelente y la comida tremendamente buena. Me llama la atención que llevé por primera vez una botella de vino a este restaurante y me cobraron sólo 10.00USD por el descorche, lo que es una maravilla en este país. Lo recomiendo.

Un recorrido largo para subir a la azotea. No hay elevador. La escalera es muy elegante, pero llega a parecer interminable. Es como una sesión de ejercicio para quemar calorías antes de la comida. Finalmente arriba, te reciben muy amablemente. La azotea es pequeña y está dividida en áreas con diferentes niveles. Hay un área sin vista al mar y con menos ventilación. Nos ofrecieron un menú de bebidas iluminado, cosa muy práctica en un ambiente a media luz. Sólo probamos entradas y estas estuvieron fabulosas( cochinillo, canelón de pato y sushi de camarones ). Sobre la carta de vinos hay que decir que es muy pobre. Un sólo Chardonnay, por ejemplo. El mesero muy amablemente se puso en modo jogging y bajó las escaleras para conseguirnos el menú del restaurante, pero resultó que el chardonnay que escogimos no lo tenían( sólo hay tres en la lista )así que terminamos tomando el que tenían arriba en la azotea. Lo interesante es que,siendo el mismo negocio, el precio de la misma botella abajo es de 35.00 mientras que en la azotea es de 60.00. Como el mesero notó mi ceño fruncido, nos dieron el precio más bajo. La noche resultó muy agradable y la cuenta estuvo bien gracias a nuestro amable mesero. Regresaría sin dudarlo, pero ya conociendo el lugar, escogería mejor mi mesa.

Un restaurante con Excelente comida para quienes conocen y les encanta degustar la buena comida italiana. Las almejas y las albóndigas son obligatorias y el rigatoni es super delicioso. El servicio muy pero muy bueno, pero llegamos a las 930pm y desde el inicio sentimos la presión para ordenar la comida. Resulta que la cocina la cierran a las 10:00pm y el restaurante a las 11:00 pm en punto. Los dueños de restaurantes deberían considerar cerrar un poco más tarde al menos viernes y sábados. Aparte de ese detalle fue una muy buena experiencia. El ambiente es agradable, pero típico de los restaurantes italianos del patio donde no se le pone mucha atención al local. El estacionamiento es algo complicado, pero tienen valet. Si quieres buena comida y no te importa el ambiente, esta es muy buena opción para comer rico y a un precio muy razonable.

Varios amigos me recomendaron el lugar. Anoche finalmente fuimos y tengo que decir que la comida es realmente espectacular. El chef es un tipo incansable que está pendiente de todos los detalles mientras camina de un lado para otro del restaurante. Es un local muy sencillo sin mucho ambiente, pero que explota su mayor potencial que es la buena comida española. Ideal para llevar el vino favorito, pues el precio del descorche es más que razonable y el más barato que he pagado. En pocas palabras: excelente comida, precio razonable para la gran calidad, muy buen servicio, poco ambiente. Ya quiero regresar para probar otros platos.

Un restaurante decorado con muy buen gusto, con muy buen servicio y muy buena comida. Una combinación que sería perfecta si los precios no fueran tan altos.La carne es excelente, pero demasiado cara y no sales de allí sin que tu bolsillo lo resienta. Ya nos calificaron este año( UBS) como el país más caro de Latinoamérica y está alza en los precios de muchos restaurantes es un reflejo de esa realidad.

Tremendo lugar para ir con la familia o los amigos. La decoración es moderna y muy acogedora y cálida a la vez con espacios amplios que permiten una sensación de relax pues parece que, de alguna manera, lograron conseguir amortiguación acústica. Muy buena atención. Todos en la mesa coincidimos en que la comida es muy buena. La carta de vinos muy pobre, pero propia de casi todos los restaurantes de comida italiana del patio. Definitivamente un lugar para conocer y para repetir.

Podría decir mucha cosas positivas sobre la calidad de la comida, el ambiente y el excelente servicio, pero todo lo puedo resumir así: es el mejor restaurante de Panamá en este momento.

Mucho mejor local que el de San Francisco; más moderno y agradable con ambientes separados para cada gusto. La comida tan buena como siempre. Deberían aprovechar la terraza para eventos musicales en vivo. Recomendado !