hay tantos puntos positivos que no caben aquí; la atención es de otro nivel, súper rápida atentos y amables, la comida wow súper deliciosa Si o si debes pedir un cocktail de la casa, sus artistas (baristas) tiene tragos para casa paladar! y sin duda ideal para una cena romántica 10/10

me lo recomendó una amiga italiana, y wow quede sorprendido por la calidad y sabor, presentación súper limpia! la atención de absolutamente todos fue increíble, el bartender el sr. huber fue súper e incluso nos dieron un limoncello de cortesía cómo digestivo. sin duda voy a ir muy seguido a probar más platillos! recomiendo los raviolis casa vecchia

servicio demasiado increíble, lugar bello súper bien decorado: La comida toda súper buena, la carne perfecta, brochetas súper variadas, el dip de berenjena con queso exquisito

tienen que probar el pork belly ENSERIO es otro nivel demasiado bueno, y las camareras atienden súper rápido!!!! área de niños y pet friendly para los interesados

si vas por los tragos no lo hagas, no son buenos y casi no le ponen alcohol, y aparte son dos restaurantes en uno, entonces la música de ambos suena y es una locura, el ambiente no es amigable para nada

pesimo comida mala, fría y tardaron hora y media, he comido hamburguesas de la calle mejores, carne sin sabor, pocas papas que malo de verdad

como siempre una cadena americana no falla! la comida de calidad! los tragos no me gustaron realmente era puro hielo y no tenían el sabor Friday’s que uno espera... pero servicio y comida impecable.

Wow no había tenido esta Epifania de un lugar tan bello como este, la atención fue brutal ósea lo máximo, las olas Del Mar, poder sentarte en la arena mientras comes. Voy a volver muy pronto, creo que la comida puede mejorar pero de resto 100% certificado

La comida excelente, atención buena, y la comida llego súper rápido. Recomiendo cualquier taco, súper tradicional y no tan caro

Pedí una pasta con lasngostinos gratinada y me trajeron otra cosa, el lugar es bastante caro para lo que sirven, a parte la corvina frita no estaba del otro mundo, pagar lo que vale un plato allí en pues no lo merece; sobre todo por un nido de aves en el techo que no te dejen disfrutar una conversación amena