Había pasado muchas veces pero era la primera vez que entraba, está localizado diagonal al famoso café Coca-Cola en Santa Ana. Asistimos por la Oferta Simple de Stand up Comedy que incluía open sangria y la pasamos muy divertidos. Se presentan varios artistas que se rotan y en esta oportunidad vimos a la Riquita, estuvo muy divertida con anécdotas del pasado que al recordarlas nos izó reir mucho. Había buen ambiente, el servicio un poco lento para mi gusto, pero satisfactorio. Nos decidimos por una hamburguesa, la cual tardo t llegó con las papitas ya frías, pero tenia buen sabor, era la Santana Burger, esta buena, al igual que el Chaufa de mariscos. La sangria algo suave para mi gusto y le ponen mucho hielo, pero se deja tomar. El servicio lento, pero muy amables. Después de la cena y el show se puede uno quedar a disfrutar de un rato de música y bailar. Regresaría en otra ocasión? Si.

Es un buen concepto el mezclar ingredientes nacional en platos tradicionales de una manera diferentes. Pedimos de entrada carimañolas de pulpo que combinadas con la salsa que trae dejan un sabor de boca muy agradable. Seguimos con un risotto con chorizos y queso blanco muy rico, algo saladito por el chorizo, así que es bueno mezclarlo con algo más neutral. Continuamos con una Milanesa que estaba muy rica. La selección de platos fuertes es reducida, pero interesante. Los cocteles de la casa tienen sabores variados para diferentes gustos y paladares.

Es un ambiente agradable con varias opciones internacionales para elegir. A pesar de ser un lugar popular especialmente para almuerzos el servicio es adecuadamente rápido, pero debes contar con flexibilidad de tiempo. En esta ocasión nos decidimos por un tagliatelle boloñesa y un emparedado de pollo que estuvieron a la altura en sabor y cantidad.

Un viaje al interior del país estando en la ciudad, la decoración excelente con muchos detalles típicos, desde le bus hasta la pared de quincha de barro y los baños estilo una cantina. La comida tiene buen sabor y porción. Los camaronws al ajillo de entrada y el caldillo de mariscos recomendados. La atención buena. Recomendado para ver un show con bailes típicos y poder disfrutar algo de baile después.

Buen ambiente para un domingo de brunch, la atención excelente, la comida muy buena, solo que hay que tener paciencia por es algo demorada, aunque vale la pena esperar. Pedimos un Parfait, muy rico, huevos turcos y huevos benedictos con salmón que fue la mejor opción, la tostada era abundante y con buen sabor. Definitivamente buen lugar para ir con amigos o familia.

Un buen lugar para disfrutar en pareja o con amigos, especialmente en la terraza que tiene buen espacio. La atención excelente, lo que se espera en un buen restaurante. La comida deliciosa, por supuesto las pastas buen hechas y sabrosas, pedimos unos raviolis fritti de mare de entrada excelentes, el ossobuco tierno y bien condimentado, seguimos con otros raviolis de pollo a la boscaiola muy recomentados. En general un agradable lugar.

Buen lugar para una salida diferente dónde puedes cenar y después disfrutar algo de show y música sin salir del restaurante. La idea de un ambiente con show interesante; sin embargo, hay poco espacio para la presentación en la cual hay fuego y humo y puede ser algo molesto. El menú cuenta con una selección básica de mariscos. Pedimos los camarones que eeruvieron ok y espaguetis con calamares y camarones el cual vino con 3 trocitos de calamares los cuales casi no se saborearon, los camarones bien y los espaguettis les faltó aceite de oliva y parmmesano. Los cócteles bonitos y bastentes suaves. El servicio bueno y atentos, la música disfrutable.

Buen ambiente para ver un juego dw fútbol. Tienen una variedad de platos interesantes para todos los gustos, con una orientación hacia la comida mediterránea. Atención esmerada y rápida, lo que a todos nos gustó. La hamburguesa de la casa, servida a buen termino y no es necesario agregarle nada.

Un buen lugar que hay que visitar en el ambiente acogedor del Casco Antiguo. Donde se mezcla un ambiente modeno dentro de la esstructura tradicional de ladrillos que se destaca en el casco. La comida buena y sirven rápido, el Classic Roubens Sandrwich tenia un toque especial por el pan. Los wraps ricos también, pero dónde se destacan es en los cockteles servidos de una manera muy particular, especialmente el Whiskey Moon. La noche del sábado amenizan con bailarines y buena música, lo que lo hace un lugar magnífico para alguna celebración. Definitivamente volveré.

Mmmm, definitivamente un lugar que no decepciona cuando quieres probar una muy buena paella con una jarra de sangria. Pueden aprovechar su promoción del mes de paella 2 x 1 para una cena española. Como siempre buen ambiente y la atención esmerada.