Segundo Muelle (San Francisco)

Para iniciar, en este restaurante es necesario decir que el valet parking es la única opción ya que los estacionamientos que tienen quedan lejos, además no permiten estacionar frente al mismo aun teniendo el espacio. La comida es muy buena ya que es comida tipo peruana, sin embargo siento que continúan bajando la calidad de la misma y subiendo los precios comparados con otros restaurantes similares y del mismo tipo de comida que hay en el país. El lugar no está mal, pero se ha quedado rezagado en el tiempo.

He visitado este restaurante en muchas ocasiones y siempre nos ha ido bastante bien. Esta última visita no fue muy agradable por la comida que no estaba en su calidad máxima y los precios los han subido, dando una relación costo calidad que va en direcciones opuestas. Lo recomiendo porque es un lugar en el que normalmente nos ha ido muy bien y el servicio es bastante bueno. A lo mejor están atravesando por un momento difícil (lo cual no me consta) pero creo que deben corregirlo cuanto antes de forma que la calidad de la comida que antes servían se mantenga ya que era muy buena.

Luego de visitar varias veces este Restaurante puedo calificarlo como debe ser. Mantienen la calidad de su comida bastante estable en cuanto a presentación y sabor. Los precios han subido un poco pero es entendible por el costo de sus insumos. Sin embargo esta última visita todos los platos estaban bastante salados, lo cual nos extrañó mucho. En cuanto a las bebidas si han bajado su calidad o sencillamente no le prestaron la atención debida ya que ordenamos vinos que estaban mas calientes que al tiempo lo cual no es justificable al igual que los Pisco Sour que eran más de 3/4 de su vaso de espuma cuando anteriormente la espuma era mucho menor. Creo que en general es un buen restaurante y opción en la ciudad pero deben cuidar mucho el mantener la calidad a fin de no desmejorarla. Por lo demás recomiendo sus causas que están todas muy ricas, el Tacu Tacu con lomo deliciosos y la Pankita de Pulpo muy rica con su picantito, El Flan muy rico y por su puesto el tradicional Suspiro Limeño como siempre delicioso. Recomiendo este restaurante pero cuidado al ordenar sus bebidas.

Tienen valet parking que debes usar para tu comodidad. La calle adyacente está usuallmente llena de carros. El ambiente es regular y bullicioso pero se te olvida con su buena comida. La parijiela que fue el plato insignia estuvo bien lograda con el eapesor del caldo apropiado. Sabor delicioao que arreglamos con picante y limón como a mi me gusta. Un vinito chileno acompañó esta cazuela de mariscos a la perfección. Los precios son muy razonables y la atención apropiada. Regresaré pues su menú variado brinda esa posibilidad.

Volví en un mes. Su oferta es buena. Menú variado. Especialidad en mariscos. Ambiente regular, servicio apurado y regular,. Estos últimos dos factores tolerables por su buena comida a precios muy razonables. No lo atracan a uno por su oferta. Probamos esta vez una parrillada marinera, el atún con risotto de hongos y corvina a la parrilla. Todos en su punto. El Chardonay Reserva Gran Tarapacá nos acompañó impecablemente.