Meze

El sitio es hermoso, la decoración griega lo hace muy acogedor. Recomiendo reservar porque se llena bastante. Probamos un vino griego cabernet sauvignon tinto delicioso. La comida estaba muy rica, recomiendo el queso feta con miel y el postre de hojaldre relleno con crema.

Ambiente muy bueno, la comida llega rapid sin embargo no por eso deja de sentirse fresca y bien preparada. El servicio regular, hay muchos meseros pero a la vez no, no hay uno que esté al pendiente de tu mesa en todo momento(o al menos así nos sentimos), había que estar levantando la mano cada vez que uno deseaba algo, creo es algo deben mejorar. Mi recomendación son sutzkakia smirneika (albóndigas) y de postre el galaktoburiko.

El lugar es hermoso con mucha luz natural. Tiene una terraza super linda. Pedimos varios platos para compartir, los mejores fueron el pulpo a la parrilla (excelente) y una entrada de masa de filo rellena de feta con miel (uff delicia). De postre pedimos un dulce de chocolate con helado de vainilla. Los licuados naturales también estaban ricos. Full recomendado.

La hostess fue muy atenciosa en nuestra llegada y brindó há nosotros una mesa en la planta baja. Los meseros siempre pendientes de las órdenes , pero la carne de cordero no estaba suave a parte de que estaba fibrosa.

En un ambiente acogedor, con un servicio estupendo se puede disfrutar de deliciosa comida griega. Tienen una forma interesante de presentar las entradas y varios ambientes le dan a este sitio un toque acogedor. Te transporta!