Madero

El lugar es acogedor y tiene mucho espacio para estacionar en el sótano (entrando por calle 58). sobre la comida, recomiendo de entrada las albóndigas - son deliciosas; de plato fuerte recomiendo los pescados, son una opción sana y que no complica si tienes duda en qué pedir. tenia mis reservas sobre este sitio, porque me habían dicho comentarios positivos y negativos, sin embargo, en mi humilde opinión, es un buen lugar para ir y regresar... varias veces.

Excelente ubicación, buen ambiente, extensos menú de opciones variadas y están disponibles para cualquier cambio en el plato buen lugar para realizar reuniones de trabajo y cumpleaños

El restaurante es muy bonito y agradable. El servicio también es muy bueno y los meseros son agradables. Las porciones son suficientes para quedar satisfecho. No recomiendo pedir la picada ya que el churrasco estaba incomible y no parecía ser carne de primera (en una mesa de 8 para un cumpleaños no tuvieron la deferencia de hacer algún ajuste o tener un detalle).

Tengo que ser honesta y decir que no me impresiono. Creo que tenia demasiadas expectativas por lo bonita de la estructura exterior, además de tener una amplia terraza y un nombre que te evocaba estar tomando café en plena Barcelona. Dentro del restaurante, es normal, hasta un poco decepcionante, es casi un El Prado o El Boulevard y su menú va exactamente de la mano con esos restaurantes. Quizas me esperaba más variedad en ensaladas o platos un poquito más "upscale" no sé, lo cierto no me impresiono. Los precios están muy razonables, y se presta ´para almuerzos y desayunos sin pretensiones.

Me encanta el sancocho, además un ambiente tranquilo para reunirse y conversar, la limonada con coco o con hiervabuena son una ricura