Los Venezolanos

Las empanadas son extremadamente gruesas, el sabor si esta bueno al igual que la salsa pero no volveria por ella, tal vez por el cafe que si estaba sabroso

Buen lugar para almorzar o comprar empanadas o arepas. El plato conocido como Pabellón, que consiste en arroz, ropa vieja, tajada y frijoles negros, considero que es la especialidad del lugar.

Andaba de paso por el área y me habían hablado de este lugar así que decidí entrar. Pedi la arepa con pierna que llego bastante rápido y un capuccino. El ambiente es bien relajado, es chiquito pero acogedor. El servicio fue bastante atento, lo unico que no me gusto fue que la mesa estaba un poco pegajosa y el piso un poco sucio pero volveria a ir por las arepas!

El lugar ya es un punto de referencia de por sí, lo que hace que sea un lugar donde no puedes ir con tiempos definidos. El servicio es el necesario: nada dedicado, con sonrisas rápidas y amabilidad en apuros. El lugar es demasiado pequeño para su clientela, y no te invita ni tan siquiera a pensar en esperar por una mesa. Por último y no por menos, la comida es muy buena, y han logrado mantener su calidad.

Pareciera que no se invierte en el negocio, cada vez que voy esta más feo y deteriorado, además la atención al cliente es mala, la comida en un principio era buena pero ha desmejorado mucho, ahora los cachitos y empanadas tienen una calidad regular al parecer cambiaron la harina y siempre falta algo a veces no hay pan dulce pero si cachito o a veces no hay cachito pero sin pan dulce, falta mejor abastecimiento de productos, lo que si es que el café, el papelón con limón y las arepas son buenas.