El Viejo Santana

El brunch de Santana sin duda es mi favorito. Excelente servicio por parte de Will y todos los encargados de nuestra mesa. La comida exquisita y el ambiente sin igual. Totalmente recomendado para ir los domingos de brunch 🥂

Unas de primeras veces comiendo en el casco antiguo y debo decir que el lugar y el ambiente espectacular la comida en su punto 🙌

Fuimos al restaurante por una promoción de Oferta Simple, por lo que había un menú fijo de una cena para dos, con New York steaks, con acompañante de papas wedge y una copa de helado. La carne no era premium, pero estaba cocida en su punto y la suavidad 7/10. Por el precio de la oferta estaba bien. El personal bastante distraído, la atención buena. Luego llegó la rumba..... Para las personas mayores que disfrutamos un buen ambiente tranquilo, excelente decoración vintage industrial, música agradable, el lugar es acogedor y te traslada a un bar cubano de la década de los 70. Pero luego a las 11 (incluso antes 10.30) comienza una invasión de chiquillos de 20 años y la música cambia a plena y reggeton y el ambiente cambia drásticamente. Consejo: si quieres disfrutar de la calma y el ambiente tranquilo llega temprano como a golpe de 8/9 y sal de allí antes de las 11.

El establecimiento es bastante acogedor, tienen una variedad de platillos buena y el servicio es agradable, son muy atentos. Después de que cierra la cocina se convierte en una disco, está bien para pasar el rato.

Buen ambiente, la comida llegó rápido aunque algunos platos fríos. Me quedo con las costillitas y las papitas de camote.