Diablicos

Lugar interesante, con un buen menú, la comida estaba buena, algo fria. La atención es buena, sin embargo hay mucho alboroto y poca organización. Mi experiencia en un fin de semana con mi familia fue cambio de mesas, mesas rodadas para allá y para acá, (no sólo las mías). Un tema logístico. Creo deben armar una estructura y ajustarse a la misma. Los baños no estaban bien, muy descuidados y sin mantenimiento.

Visitamos este lugar un domingo con mi esposa y mi hijo, nos pareció muy atractivo la presentación de música típica y bailes, ya que nosotros no somos panameños y aprendimos un poco de su cultura. En cuanto a la comida pedimos una picada para dos personas la cual nos gusto mucho, su presentación es atractiva, su ceviches frescos y su comida recién hecha, pedimos un plato para niños de dedos de pescado, el cual estaba un poco salado y lo sentí caro $12 para un niño. Lo volveremos a visitar cuando tengamos alguna visita.

El lugar es bonito en su decoración pero sumamente ruidoso, la comida no estaba mal, pero le faltaba un poco de sabor además de una presentación no muy atractiva.

Es un restaurante más bien turístico, pues es el más conocido en el Casco de comida auténtica . Tienen shows en vivo los fines de semana, y una decoración que va totalmente con la temática de Panamá. El trío de ceviches es buenísimo. Tiene buena comida, pero para ser sincera no causó ningún asombro en mí. Lo recomiendo para quienes vienen a visitar nuestro país, y si pueden mejor disfrutar el ambiente en las mesas de afuera del restaurante.

Un restaurante muy agradable en cuanto a su ambientación cultural. El servicio es bueno, pero podría ser mejor... Los platos están muy ricos, la verdad