Es pollo rostizado y luego pasado por la parrilla para darle el toque del carbón. Muy bueno la verdad. Compré un pollo entero con arroz amarillo, frijoles negros, yuca al mojo (realmente es puré, muy sabroso) y viene acompañado de una salsa de ajo (excelente) y otra verde, un estilo de chimichurri. La presentación para llevar incluye una caja donde colocan el pollo, el arroz amarillos, las salsas, un juego de cubiertos, un par de guantes desechables y dos pañitos húmedos para limpiarte al final. Los otros acompañamientos vienen fuera de la caja.
El pollo es sabroso por el tipo de doble cocción. El arroz y los frijoles son normales. La yuca al mojo, en un estilo puré, es muy buena. Todo esto cuesta USD 18.49 lo cual me parece excesivo para el valor promedio del pollo asado en Panamá. A pesar que el pollo es muy bueno, tampoco es la panacea.
Sobre el local: es muy estrecho. No hay mesas, solamente una barra. No es lugar para ir con familia o en una cita. Sólo sirve para llevar la verdad. El sistema de extracción de la parrilla es deficiente. El local adentro está lleno de humo, al menos cuando yo estuve.
En resumen: vale la pena probarlo una vez y comerlo muy de vez en cuando. Si no te importa pagar un exceso por guantes, wipes, etc. Ok, adelante. Considera que vale casi 19 dólares y la porción de los acompañamientos sólo da para 2 personas.
En lo personal, en otros lugares se obtiene por el mismo valor: un pollo asado con más acompañamientos y hasta bebidas, sin dejar de ser sabrosos.
