Aya la Vida

No tienen acceso a sillas de ruedas y la temperatura no es uniforme. El ambiente bueno, la comida bastante normal

La comida es espectacular. Todo lo que he probado ha estado delicioso, súper fresco y con una presentación impecable. Sus mariscos y ceviches son top, pero realmente cada plato sorprende. Me encanta también su coctelería, muy creativa y con sabores super bien balanceados.

Muy bonito el restaurante, el ambiente 10/10, hubo música en vivo, animación y pinta caritas para los niños (buenísimo esto). Fuimos por un brunch dominguero, me pareció un buen precio por $27 p/p incluía entrada, plato fuerte, postre, y bebida. También te daban la opción para escoger uno de cada cosa. El servicio brindado por Isaac Joel fue bueno y atento! Pedimos de todo un poco para probar: el pescado frito, chicharrones, tortillas, carimañolas, hojaldre, parfait, un postre de fresa y mamallena. El chicharrón estaba bien solo que faltaba un poco más de sal. La masa de hojaldre no estaba tan buena (demasiada masosa), y el sancocho estaba un poco espeso, pero de sabor estuvo bien la sopa. Lo más rico fue la tortilla bien crunchy por fuera y suave por dentro y el postre de mamallena estuvo buenísimo! Recomendaría el restaurante para turistas que quieran probar un poco de los sabores de Panamá. Seria bueno que diera la opción de postre en el brunch un raspao con malteada AKA shaved ice.

Uno de mis lugares favoritos para relajar y disfrutar alta cocina panameña. Un lugar acogedor y tranquilo cuando no hay el show en vivo. Muy buen servicio. Solo una sugerencia - tener más cuidado cuando marcan los platos gluten-free y vegano/vegetariano porque no siempre lo son.

Excelente ambiente e infraestructura, se siente súper acogedor para una cena en el casco viejo, los comensales de primer nivel y la comida muy buena con mezcla autóctona y contemporánea