Calle Dragón es un lugar vistoso y bonito, ideal para pasar un buen rato. Sin embargo, encuentro que la atención es un área en la que fallan estos lugares. Aunque los bartenders esperan su propina, no atienden de manera correcta. Aparte de eso, todo lo demás está bien.

Comienzo por lo positivo. El lugar es agradable y cómodo, con buena decoración y una excelente vista. La comida, sin embargo, es regular. Le falta un toque especial. El pulpo no parecía estar bien a la parrilla, y el filete de carne estaba mas o menos, le falto sal y pimienta. La atención, aunque intentaron destacarse, es deficiente. No toman nota de los requerimientos de los clientes. En nuestra mesa éramos cinco personas, y hubo incidentes en tres platos y una bebida, que no siguieron las indicaciones o solicitudes del cliente, causando molestia e incomodidad. El precio es elevado, lo cual debería compensarse con mejor comida y servicio. Deben mejorar; de lo contrario, no se merecen las propinas.

Visité Sante después de muchos años y quedé gratamente bien. La comida fue buena y el ambiente agradable. La atención fue buena, con una extensa lista en el menú. Sin embargo, a pesar de que el restaurante no estaba lleno, la entrega de los platos fue bastante lenta. Además, no había pan para hamburguesas, lo cual fue una falla notable. A pesar de estos inconvenientes, todo lo demás fue positivo. Recomiendo este lugar.

Si buscas una experiencia gastronómica, te recomiendo este restaurante peruano. La comida es verdaderamente deliciosa, destacando especialmente las alitas que son simplemente espectaculares. La atención es muy buena, con un personal siempre dispuesto a hacerte sentir bienvenido y cómodo. El lugar es agradable, con un ambiente que invita a disfrutar de cada momento. Además, los tragos son excelentes, perfectos para acompañar cualquier plato. Es un lugar al que siempre vuelvo, y cada visita es una confirmación de su calidad y calidez.

Recientemente visité este restaurante y, lamentablemente, la experiencia dejó mucho que desear. La única persona que destacó por su amabilidad fue la señora María, quien manejó nuestra reserva con eficiencia.Sin embargo, una vez llegamos al restaurante, la situación cambió. Apenas nos entregaron la carta, en menos de dos minutos el personal ya nos estaba presionando para tomar el pedido, lo cual no nos dio tiempo suficiente para revisar el menú con calma. Aunque esto podría interpretarse como un intento de brindar un servicio rápido, en realidad resultó ser molesto.La atención fue inconsistente. No nos ofrecieron agua durante más de media hora, mientras que las mesas a nuestro alrededor, ocupadas después de nuestra llegada, recibieron agua inmediatamente y sin solicitarla. Este tipo de desigualdad en el servicio es inaceptable.Además, la entrega de los platos fue descoordinada. En lugar de servir todos los platos al mismo tiempo, llegaron de manera escalonada, obligando a unos comensales a esperar mientras otros ya estaban comiendo. Este descuido en la sincronización afecta negativamente la experiencia general.La calidad de la atención ha sido pésima en esta ocasión, y debido a estas deficiencias, dudo en regresar. Cabe mencionar que he visitado este restaurante en otras ocasiones y mi experiencia no había sido así.

**Ambiente:** * El restaurante actual, aunque acogedor, podría beneficiarse de un espacio más amplio y cómodo para mejorar la experiencia general de los comensales. **Comida:** * La comida asiática que preparan es **exquisita**, con una sazón excepcional que destaca los sabores auténticos de la región. *Sugerencias:* * Considerar un cambio de local a uno más espacioso y confortable para optimizar la experiencia gastronómica. * Mantener la calidad y el sabor excepcional de la comida asiática que los caracteriza. Recomendación: Recomiendo este restaurante a los amantes de la comida asiática auténtica y con un gran sabor. Sin embargo, si buscan un ambiente más espacioso y cómodo, podrían considerar otras opciones.

Os Segredos de la Carne es un auténtico paraíso para los amantes de la carne en Panamá. Desde que entras, te sumerges en una experiencia culinaria única, donde la calidad y el sabor son protagonistas indiscutibles. La variedad de cortes de carne y la forma en que son preparados hacen que cada bocado sea una explosión de sabores exquisitos. El ambiente del restaurante es acogedor y el servicio es impecable, siempre atento a cada detalle para asegurar una experiencia memorable. Sin duda, os Segredos de la Carne es un lugar que recomendaría una y otra vez a cualquier amante de la buena comida.

Es deliciosa, con una explosión de sabores que te transportan a las diferentes regiones del Perú. Se nota la frescura de los ingredientes y la maestría en la preparación de cada plato. La variedad del menú es otro punto fuerte, con opciones para todos los gustos. La atención: Es agradable y atenta. Se destaca la atención de la propietaria, quien te hace sentir como si fueras un invitado especial en su hogar. El ambiente del lugar es tranquilo y acogedor, perfecto para disfrutar de una buena comida en compañía. En general: Este restaurante es una excelente opción para los amantes de la comida peruana. La calidad de la comida, la atención y el ambiente lo convierten en un lugar al que sin duda volveré y que recomendaré a todos. Puntos adicionales: La atención especial de la propietaria. Es un detalle que hace que la experiencia gastronómica sea aún más memorable. Me da gusto saber que también disfrutan del ambiente tranquilo del lugar. Creo que es un factor importante para crear una atmósfera agradable y propicia para disfrutar de la comida. En definitiva: Este restaurante es un rincón peruano que merece ser descubierto por todos aquellos que buscan una experiencia culinaria auténtica y deliciosa. ¡Felicidades a los dueños por este gran lugar!

Ambiente: El restaurante en CdE posee una atractiva decoración de estilo texano-americano, creando un ambiente acogedor y agradable. Comida: Si bien la ambientación del lugar es positiva, en cuanto a la comida, mi experiencia no fue la mejor. Considero que la calificación del restaurante está sobrevalorada en este aspecto. Sabor: La cocina del restaurante, catalogada como "comida gringa", no alcanzó mis expectativas. Si bien los gustos son subjetivos, en mi opinión, este tipo de preparación no representa lo mejor de la gastronomía. Personalmente, prefiero la riqueza y variedad de sabores que ofrecen las cocinas de México y Argentina. En cuánto a carnes prefiero la gastronomía gaucho/rodillos o lugares de comida especializada en carne. Recomendación: Si bien el restaurante ofrece un ambiente agradable, considero que la calidad de la comida no está a la altura de las expectativas que genera su calificación. Para aquellos que buscan una experiencia gastronómica memorable, recomendaría explorar otras opciones que ofrezcan una mayor variedad y calidad en sus platillos.

El restaurante ofrece descuentos ocasionalmente, los platos son buenos pero la atención es irregular y a veces confusa. Lo único negativo es que aumentaron los precios de todos los platos en un 25%, lo cual es bastante desagradable. Todo lo demás bien.