El lugar es súper acogedor y la decoración es hermosa. El personal muy atento pero aún así la atención no terminó de ser buena. Esperaba mucho más de la comida, todo estuvo regular al igual que las bebidas.

Está ha sido la peor experiencia que he tenido en años en un restaurante. Pedimos agua CINCO veces, nos llegó una hora después, pedimos mojito y limonada de hierba buena y nos dijeron más de media hora después (después de haber pedido las bebidas reiteradas veces) que no había hierba buena. Pedimos solo entradas porque el servicio de unas alitas y dos entradas más se demoró hora y media. La persona que nos atendió no tenía ni idea del menú y no nos pudo orientar con nada.

si les puedo recomendar algo, es que no vengan aquí. pedí un açai bowl y me lo dieron mega congelado, le hice el comentario al mesero que si me lo podían cambiar por uno más al tiempo o si no que me cancelaran la orden… el chico volvió con el açaí calentado en microondas, mala mía me lo quedé porque tenía demasiado hambre pero error total pedimos un emparedado y el mesero literal nos dice “lo pueden acompañar con ensalada, papas fritas o chips” sin decirnos que con costo adicional… me di cuenta cuando nos dió la cuenta al final, todo mal en este lugar al que seguramente no volveré