Desde niña no regresaba a este lugar y me sorprendió que al regresar luego de más de 10 años mantienen la misma sazón, los mismos sabores. Definitivamente si eres amante de la comida de mar este lugar no va a decepcionar y con un ambiente bastante agradable y rústico.

La comida es exquisita desde el arroz Yang Chaw que tiene un ahumado delicioso hasta el puerco especial, con sabores que no son los típicos de comida china que encuentras fácilmente. Muy atentos a todo y a recomendaciones sobre el menú y un ambiente bastante familiar y acogedor.

De los mejores lugares para comer gelato en Panamá, sus sabores y textura en verdad son distintos y deliciosos a otros lugares que hacen que valga la pena lo que cueste.

La comida cumple con los estándares de los demás nacionsushi, aún que uno de los rollos se sentía chicloso a pesar de ser frito, el servicio no estaba muy atento y había que estar buscando las cosas por cuenta propia, el ambiente afuera tiene una buena vista de en el atardecer.

La clásica ladopsomo es la más confiable en todas las sucursales que nunca te decepciona, con su tzatziki que le da el mejor toque. Las pizzas tienen una masa delgada y firme que sostiene todos sus ingredientes y sin sobrecargarlos que te generan una satisfacción al terminar de comer.

Un ambiente super bueno de tarde y de noche, un servicio muy atento y agradable. La comida en el restaurante Geisha Negra los rollos están deliciosos (Sake Crunch súper recomendado). En Segundo Muelle el ceviche frito tiene una buena mezcla de sabores con la salsa de ají y el dulce del maíz.

Un servicio atento, aunque la comida demoró bastantito tiempo en salir considerando que solo pedimos 4 platos, los rollos tienen buen sabor y cada uno algún distintivo del otro. No me gustó que el wasabi no tuviera esa sensación propia del mismo, se sentía aguado y sin sabor.

Con un ambiente muy al estilo pop y para pasar en compañía, los trabajadores son súper atentos y amables. Los chicken fingers están súper crujientes y no se sienten grasos y con las salsas son un 10/10, las yuquitas son tan tiernas como para balancear las texturas y es perfecto. La mermelada de ají chombo es de las mejores salsas si te gusta lo dulce.

Su ambiente es top top, en la terraza la vista es increíble para pasarla con amigos o familia, el servicio es súper atento a todo lo que necesites. En cuanto a la comida es muy buena, aunque los precios son un poco elevados tratándose de comida que quizás puedas conseguir en otros lugares en un menor precio, aún así es muy buena y llega a buen tiempo.

Me gusto mucho el sabor y tamaño de los rollos, que definitivamente estaba muy bien hechos porque no se deshacían fácilmente. El ramen bien sazonado, aunque un poco subido de sal.