El sitio suele ser bastante acogedor e intimo. En esta oportunidad, a pesar de tener espacio en el área de las plantas, nos sentaron al lado de una reunión de mas de 10 niñas que no paraban de gritar y reírse. La mesa que nos dieron era tan pequeña que no cabían los vasos, la entrada y los plantos; al momento del plato principal, ambos no cabían con los vasos y botella en la mesa. Es la primera vez que voy y me ofrecen una mesa tan pequeña habiendo reservado y existiendo espacio en el área de las plantas.