la comida excelente, como siempre. Compartimos varias entradas como el tuna pizza, dumplings de cordero y dátiles rellenos que estuvieron muy bien. De plato principal el destacado fue el rissotto de hongos con cuatro quesos que estaba excelente y también la entraña. Lo que falló fue el servicio, muy demorado, con errores y éramos solo tres personas. Teniamos que llamar al mesero para que nos atendieran y no nos sabían explicar el menú. Muy pobre atención para un restaurante de esta calidad.