Hemos sido seguidores de este restaurante desde que iniciaron, hace años, en su primer local en Clayton. A lo largo del tiempo, la calidad de la comida ha sido muy buena y consistente. Esta vez escribimos esta reseña para hacer resaltar la atención sobre un aspecto particular, el tamaño de las raciones, que con el paso del tiempo se han ido reduciendo progresivamente, hasta llegar a un punto en el cual una persona no queda satisfecha con un plato principal, como sí ocurría tiempo atrás.