Fuimos un domingo a un almuerzo tardío. La atención estuvo bastante regular a pesar de que el restaurante no estaba lleno. Habiamos llegado a las 2:00 pm y no se nos advirtío que a partir de las 3:00 p.m cambia el menú a uno más reducido solo de picadas. Cuando fuimos a pedir postre, nos dijeron que ya no era posible dado que habian cambiado al menu reducido. Así que aquellos que vayan para almuerzos, lleguen temprano o si llegan tarde pidan sus postres cuando ordenan la comida. El ambienta agradable, el lugar impecable y con linda decoración. La terraza amplia y simpática. La comida estuvo buena pero no extraordinaria. El Tartar de Atun y los taquitos estuvieron buenos. Volveré a ir pero por la noche, para tener oportunidad de probar el menu completo y para ver si nos va mejor. Yo tenia altas expectativas pues me encantaba el Tomillo del Casco, pero resultó que lo único igual era el nombre.