Un restaurante de hace 20,000 años, aún vigente en la mente y el corazón de los panameños por la calidad de su comida y su personal. Siempre es bueno y rico venir a comer aquí, no importa el día ni la hora. Tienen un menú muy extenso y variado para todos los horarios, edades, gustos y presupuestos. Las comidas vienen en buena proporción, temperatura y sabor excelente. Aquí, hasta el agua es más rica.