Fui a desayunar con mi hijo y compartimos un emparedado de filete con tocino y mozzarella y unas carimañolas. Complementamos con licuados de piña. Riquísimo todo...quedamos satisfechos y pasamos buen rato conversando y viendo el partido de fútbol que estaban pasando en las pantallas. Ambiente agradable ya que no estaba muy lleno.