Las ordenes de este restaurante demoran demasiado en ser llevada a la mesa. EL Sushi, apanadito roll que se supone es frito y caliente llego a la mesa frío como cualquiera de los otros. Poca amabilidad, el personal no mostró sonrisa y se siente la presión para ordenar, lo que lleva a ordenar cualquier cosa menos lo que apetece.