Vinimos para un postre en la noche. El lugar es súper bonito y acogedor. Probamos los nuevos productos con Baileys. Pedimos un Baileys Dream que son 2 bolas de helado, con sirope de caramelo, chipas de chocolate amargo y 2 pirulines. También pedimos el Baileys Shake pero no nos mato. No se le sentía el sabor a Baileys y se sentía súper aguado.