El pollo es sencillo de preparar y un arma de doble filo; puede quedar riquisimo o desastroso. En este caso, la verdad, el filete que pedí estaba perfecto en términos de cocción, sabor y tamaño de la porción; los felicito. Estuvo acompañado de papas fritas crujientes junto con una salsa chimichurri que pasó sin pena ni gloria. Pedí adicional una orden de yucas fritas que dejó mucho que desear. En este caso, pelaron y cortaron la yuca; de allí directo a la freídora pero no se logró el punto de cocción adecuado y que se hubiese conseguido fácilmente hirviendo la yuca hasta suavizarla para luego freírla.