Este lugar es uno de mis preferidos por su ambiente, ya que está cerca de la falda de un cerro en El Valle de Antón! Sus platos son variados y por lo general hemos desayunado y cenado! Pedimos camarones al ajillo con papas y en otra ocasión corvina frita con patacones. Los postres muy bueno, sobre todo, el flan de la casa! La atención ha sido siempre muy buena!