Fui hace unos meses atrás con mi novia a bocas y nos llamo la atención que a la entrada de este restaurante habían dos cañones y decidimos probar suerte. El restaurante tiene una vista total al mar, con su propio muelle y un ambiente agradable, pedimos filetes de pescado arroz con coco y ensalada, de nuestra estadía en bocas, una de las mejores elecciones que hicimos ademas de económica en su calidad vs precio.