Comida de autor con fusión asiática y panameña, en donde cada plato tiene una historia y es explicado por parte de los meseros que son bien atentos. Recomiendo de entrada el Dong Po en palito, el Tira ito de Mero, y de platos fuertes el Pescado caribeño y Udon de Almejas Guanciale con el acompañamiento de camotes. Postres todos estan buenos. Buen whiskey japonés sirven y cocteles especiales con toque asiáticos. Además cuentan con una barra de café de especialidad con granos panameños. Definitivamente una experiencia para repetir y conectar. Nota: Cuentan con valet parking gratuito.

Primero que todo en el lugar solo había una señora atendiendo en las mesas y en la cocina. No muy buen servicio. La comida era simple, mas tortilla que carne, y para el precio que costaba no lo ameritaba. La agua de horchata sabia mas a agua, muy simple tambien.

Excelente.. Lugar.. Servicio 100%.. Y el plato de carne el mejor.. 100 recomendado. Degustacion de whiskey de todo tipo en especial el whiskey-mojito.