Buen ambiente, seguridad amable en la entrada, buenas pintas, los tragos más o menos pero la atención deja mucho que desear. Las porciones son reducidas (pizzas de 2 pedazos por ejemplo). Pedimos agua y nunca llegó.

Buen servicio, amables, explican las diferencias entre platos y hacen concesiones en los platos para garantizar que la experiencia sea positiva. Relación costo beneficio buena, las porciones son generosas y la calidad de la comida es buena. Recomiendo el guacamole y los nachos. Las margaritas no están fuertes pero tiene muy buen sabor.

Costo beneficio la comida está ok, las porciones de nachos son generosas aunque la carne estaba salada. Solicitamos que sirvieran la crema agria aparte y cuando trajeron la comida vino todo mezclado. Nos sentamos afuera y se siente un ambiente inseguro y las mesas están desbalanceadas. En cuanto a la atención, fue demorada y fingida. En general, una experiencia 3.2

Me encantó el concepto del lugar, acogedor, arriba y afuera tiene mejor ambiente que en n planta baja. Es pequeño, la comida es buena, nos sirvieron las pastas al dente, un poco bajo de sal para mi gusto, la masa de las pizzas de buen sabor y textura. Me faltó un poco de más de ingredientes a las pizzas en esta ocasión. el serbio es amable, un poco más demorado que en las demás sucursales. Buenas opciones de cervezas, sangrias y vinos.

Buen servicio, personal amable (demasiado encimoso para mi gusto), la comida la trajeron rápido. La sangria normal, buena porción, las almejas al ajillos ok, las yucas fritas no son “naturales”, la pizza buen sabor, buena masa, pero como lo sirven en platos de vidrio de agua toda y queda así como pan mojado.

Buena comida, buen servicio, tiene espacio en terraza aunque es un local pequeño, buenas sangrias y en promo (2x1). Les recomiendo la Jalea y la sangría blanca y de postre un crepé crocante.

Lugar acogedor y pintoresco, servicio rápido y amable. La comida la sirven con prontitud. Relación costo calidad buena, han reducido las porciones pero todavía son decentes. Para mi lo mejor de este restaurante es el guacamole especial que te preparan en la mesa.

Es una opción interesante, de esas que cada quien debe experimentar. Se llena, tiene opción al aire libre y la atención es buena. Usualmente está el dueño, quien está pendiente que todos los clientes estén satisfechos. La comida viene en buenas porciones, me parece que tiene un punto de picante alto, deberían tener la opción de sin picante para aquellos que no comen picante. Es demasiada salsa para mi gusto, y luego de un rato uno se “empalaga”. Los tragos son muy dulces para mi gusto, pero no son aguados.

Buena opción para comer tipo italiano al aire libre, servicio relativamente rápido y con buenas opciones es de tragos y postres. La pizza Locanda es una buena opción de pizza y de las pastas la Capri y la Elodie son de mis favoritas. A la vongole es “la vieja confiable”, las almejas al ajillo son buenas pero la porción es reducida. La sangria rosada es buena.

Lugar pequeño, acogedor, de las mejores pizzas de masa delgada que he probado en la Ciudad. Les recomiendo La Rústica y La Caprese. Las Bruschettas de la casa es una de mis entradas preferidas. Las pastas son deliciosas, usualmente al dente y les recomiendo pedir salsa blanca con toque de pesto. La sangria es buena también. Los postres no son el fuerte.