Es la segunda vez que vamos a este restaurante y nos encanta, la calidad de la comida, la variedad de sus platos, el sabor y el buen servicio. Además, el lugar tiene muy buen ambiente, anoche había jazz en vivo y tenemos entendido que lo hacen varios días a la semana. La carta de vinos es excelente y la sangría está muy buena, pero lo mejor es la atención personalizada de su propietaria Elizabetha. Si no has ido, no sabes lo que te pierdes!

La verdad nos sorprendió este lugar, la comida estuvo rica, buena relación calidad-precio, el servicio estuvo de primera y el sitio está muy bonito decorado y hasta con música de ambiente con un dj, muy agradable la experiencia.

Muy buen ambiente, muy acogedor el restaurante, muy buena comida, he ido varias veces y hasta el momento la experiencia ha sido siempre buena. Muy recomendado.

Este lugar nos encantó, muy acogedor y la comida deliciosa, el personal muy atento y la chef Gisella súper encantadora. Definitivamente regresaré para probar más platos.

Es un sitio bastante bueno para ir en familia o en grupo de amigos, un ambiente bastante relajado e informal.

Lastimosamente ni pudimos entrar, ya que es un sitio donde tiene unas políticas poco usuales en Panamá, no permiten reservaciones, te hacen esperar en la calle un rato y cuando llega tu turno para entrar, no te dejan si falta una persona en tu grupo. El anfitrión muy prepotente, cero amabilidad con el cliente. Qué pena! Definitivamente no regresaría y no lo recomiendo.