Comida con un sabor y ambiente muy auténtico. Definitivamente hay que saber que pedir del menú o preguntar, porque existen algunos platos que no volvería a pedir, con esto quiero decir que algunas cosas no son para todos. Habiendo dicho esto, existen platos que son una maravilla, desde las entradas hasta el postre. Vale la pena visitar y vale la pena explorar los platos. El servicio es de primera clase, no tengo queja alguna por la atención. Los tragos si los veo un poco caros, pero igual muy buenos. Me gustaría ver más tragos con licores griegos, si me agrada que tengan vinos griegos así poder probar productos distintos. El aceite de oliva que usan es tan fragante y sabroso, que dan ganas de tomarlo con cuchara.

Un gasto pub muy bueno, quizás el mejor en Panamá. La comida es muy buena en sabor y calidad, siendo un pub estilo Inglés no se puede esperar platos gourmet, pero lo que hacen lo hacen muy bien. Si quieres una hamburguesa, fish and chips, alitas, pasarla bien en un ambiente muy único con bebidas bien preparadas y una servicio que te permite dedicar tu atención a tu compañía y no estar correteando al salonero, este es un lugar donde la vas a pasar muy bien. Mi unica queja, cada vez se llena más este lugar, la última vez que fuí me sentí un poco apretado en espacio. Quizás fue la mesa que me tocó, pero deberían considerar o expandir o abrir una segunda ubicación (esto es más fácil dicho que hecho pero te habla de la demanda que tiene este lugar).

Con respecto a la comida, sabor autentico, no hay que viajar al DF contar con sabores autóctonos de la comida mexicana. Todo al pastor es muy bueno, quizás el mejor en Panamá, los tacos de birria, no he encontrado uno mejor que aquí. También cuentan con banderitas, un trago muy popular si vas a México que otros restaurantes de comida mexicana no tienen. 0 quejas con el menú, el sabor de la comida o la calidad, si he notado que el precio ha subido en general lo cual lo hace menos atractivo para visitar con tanta frecuencia. El servicio también ha tenido una desmejora a través del tiempo. Antes muy pendientes con las comidas, los tragos y los tiempos, es decir, si tengo que consultar cuanto más demora mi comida es porque hay algo que no está dentro de lo normal. Prefiero que me informen si paso algo a estar yo llamando al mesero para preguntar. Cuando se pide un trago y hay que volverlo a pedir porque no llegó, algo no esta bien allí. No es grave, pero necesitan evaluar qué está pasando, si se torna recurrente fácil puede dañar la experiencia. El ambiente es muy bueno, pero existen 2 cosas que siempre me ha llamado la atención. Cuando el local está lleno, no hay donde colocar el carro. Igual, así como está lleno puede ser que lo único disponible sea afuera (en la terraza) y estás justo al frente de carros que entran y salen con las luces y el ruido en tu cara. Mi única queja, hay oportunidad allí.