Lindo lugar con un ambiente tranquilo para hablar, comer, tomarse un café o pedir un postre. Buen ambiente y buen servicio. También tienen un espacio con libros a la venta y algunas piezas de diseñadores locales. Musiquita tropical / bossa. Trabajaría la iluminación, pero en general, buen sitio.

La distribución de las sillas y mesas está un poco complicada, al igual que la posición de la caja, la cual puede confundirse con la barra si es la primera vez que lo visitas. De comer pedí un sandwich de pollo, el cual no estaba malo, sin embargo no fue mi favorito (un poco frío para haber salido del grill y con algunas partes del pollo que no quieres comer), no creo que siempre sea así, quizá no fue mi día en ese aspecto. El servicio puede mejorar mucho, quizá dando la bienvenida o preguntarle al cliente si desea algo una vez éste se haya sentado en la mesa -vi a una persona irse por esta razón-. Lo recomendaría para un café y por la buena música.