Un lugar con una bella decoración, muchos detalles que hacen que vivas una hermosa experiencia. La atención de Camilo, fue muy buena. La comida deben mejorarla. Pedimos un risotto de langostinos, pero nos decepcionó, no estaba meloso como debe ser un risotto. La entrada que era un ceviche tenía mucho limón. El sushi,’sí me gustó. El postre, regular. La verdad que un lugar, con esa decoración, iluminación y música de ambiente es para que la comida esté extraordinaria. Tiene potencial para que así sea.